martes, 16 de noviembre de 2010

El Escapulario del Carmen. Un Signo de fe y Compromiso Cristiano


LOS SIGNOS.
-En la vida humana
Vivimos en un mundo hecho de realidades materiales llenas de simbolismo: la luz, el fuego, el agua… existen también, en la vida de cada día experiencias de relación entre los seres humanos, que expresan  y simbolizan cosas mas profundas, como el compartir la comida (signo de amistad), participara en una manifestación masiva (signo de solidaridad), celebrar juntos un aniversario nacional (símbolo de identidad).
Tenemos necesidad de signos o símbolos que nos ayuden a comprender y vivir hechos de hoy o ayer, y nos den conciencia de lo que somos como  personas y como grupos.
-En la vida cristiana
Jesús es el gran don y signo de amor del padre.  El estableció la iglesia cama signo e instrumento de su amor. En al vida cristiana hay también signos. Jesús los utilizo: el pan, el vino, el agua, para hacernos comprender realidades superiores que no vemos ni tocamos. En la celebración de la eucaristía y de los sacramentos (bautismo, confirmación, reconciliación, matrimonio, orden sacerdotal, unción de los enfermos) los símbolos (agua, aceite, imposición de manos, anillos) expresan su sentido y nos introducen en una comunicación con Dios, presente a través de ellos.
Además de los signos litúrgicos, existen en la iglesia otros, ligados a un acontecimiento, a a una tradición, a una persona. UNO DE ELLLOS ES EL ESCAPULARIO DEL CARMEN.

Historia de un signo mariano
Uno de los  signos de tradición de la iglesia, desde hace 7 siglos, es El Escapulario de la virgen del Carmen. Es un signo aprobado por la iglesia y aceptado por la Orden del Carmen como manifestación externa de amor a María, de confianza filial en ella y como compromiso de imitar su vida.
La palabra “Escapulario” indica un vestido superpuesto, que llevan los monjes durante el trabajo manual.
Con el tiempo se le fue dando un sentido simbólico: el de llevar la cruz de cada dia, como discípulos y seguidores de Jesús.
En algunas ordenes religiosas, como el Carmelo, El Escapulario se convirtió también en un signo de mare de ser y de vivir. El Escapulario pasó a simbolizar la dedicación especial de los carmelitas a María, la Madre del señor y a expresar la confianza en su protección maternal; el deseo de imitar su vida de entrega a Cristo y a los  demás. Se transformo en un signo mariano.
En la edad media, muchos cristiano quisieron asociarse a las ordenes religiosas fundadas entonces. Franciscanos, Dominicos, Agustinos, Carmelitas. Surgió un laicado asociado a ellas, por medio de Cofradías o Hermandades.
Todas las Ordenes religiosas quisieron dar a los laicos un signo de su afiliación y participación en su espíritu y en si apostolado. Ese signo era una parte de su hábito: la capa, el cordón, El Escapulario.
Entre los carmelitas se llego a establecer El Escapulario reducido en tamaño como la señal de pertenecía a la orden y a la expresión de su espiritualidad.

Valor y  Sentido
El Escapulario hunde sus raíces en la tradición de la Orden, que lo ha interpretado como signo de protección materna de María. Tiene, en si mismo, a partir de esa experiencia plurisecular, un sentido espiritual aprobado por la iglesia.
Representa el compromiso de seguir a Jesús, como María, el modelo perfecto de todo discípulo de Cristo. Este compromiso tiene su origen en el bautismo que nos transforma en hijos de dios.
La Virgen nos enseña a:
·         Vivir abiertos a Dios y a su voluntad, manifestada en los acontecimientos de la vida,
·         Escuchar la Palabra de Dios en la Biblia y en la vida, a creer en ella y a poner en práctica sus exigencias.
·         Orar en todo momento, descubriendo a Dios presente en  todas las circunstancias.
·         Vivir cercanos a las necesidades de nuestros hermanos y a solidarizarnos con ellos.
Introduce en la fraternidad Carmelo, comunidad de religiosos y religiosas, presentes en la iglesia desde hace más de 8 siglos, y compromete a vivir el ideal de esta familia religiosa: la amistad intima con Dios en la oración.
Coloca delante el ejemplo de los santos y santas del Carmelo, con los que se establece una relación familiar de hermanos y hermanas.
Expresa la fe en el encuentro con Dios en la vida eterna, mediante la ayuda de la intercesión y protección de María.

Normas Prácticas
·         El Escapulario es impuesto, solo al primera vez, por un sacerdote o por una persona autorizada.
·         Puede ser sustituido por una medilla que tenga por una parte la imagen del Sgdo. Corazón y por otra la de la Virgen.
·         El Escapulario exige un compromiso cristiano autentico: vivir de acuerdo con las enseñando del evangelio, recibir los sacramentos y profesar una devoción especial a la Sma. Virgen que se expresa, al menos, con la recitación cotidiana de Tres Avemarías
EL ESCAPULARIO DEL CARMEN
No es
Un signo protector mágico.
Una garantía automática de salvación.
Una dispensa de vivir las exigencias de la vida Cristiana.

Es un signo
*Aprobado por la Iglesia hace siete siglos.
*Que representa el compromiso de seguir a Jesús como María:
- Abiertos a Dios y a su voluntad.
- Guiados por la Fe, la Esperanza y el Amor
-Cercanos a las necesidades de los demás.
- Orando en todo momento y descubriendo a Dios presente en todas las circunstancias.
*Que introduce en la familia del Carmelo
*Que alimenta la esperanza del encuentro con Dios en la vida eterna con la ayuda de la protección e intersección de María.

“Quien viste el escapulario….
…. Experimenta la presencia dulce y materna de María, en el compromiso cotidiano de revestirse interiormente de Jesucristo y de manifestarlo vivo en si para bien de la iglesia y de toda la humanidad.”

Juan Pablo II
Tomado de la Carta de S.S. Juan Pablo II
en los 750 años de la entrega del Escapulario

No hay comentarios:

Publicar un comentario